La joven cantante aporta una presencia asombrosa a la mezcla de improvisación de estudio del saxofonista de jazz.
Si su música suena a truco, el último disco de Gendel lleva esa impresión aún más lejos. LIVE A LITTLE une al nativo de California con la cantante Antonia Cytrynowicz, la hermana menor de la pareja de Gendel, Marcella. Cytrynowicz, que tenía 11 años cuando se grabaron las canciones, improvisa la voz mientras Gendel improvisa con varios instrumentos. Ella aporta al álbum el signo de interrogación de la extrema juventud. Los oyentes podrían preguntar: ¿ LIVE A LITTLE es un proyecto favorito para una familia talentosa? ¿Un impulso en la carrera de una artista naciente que todavía no podría haber encontrado su voz? Gendel, sin embargo, tiene oído para los colaboradores que desafían las convenciones, y con pies tanto en la vanguardia como en la corriente principal, reconoce cuando las dos sensibilidades comparten puntos comunes utópicos, como su relativa disposición a pasar por alto la edad y los logros como prerrequisitos artísticos. No es el primer compositor de jazz que colabora con familiares y niños: Ornette Coleman le pidió a su hijo Denardo que se uniera a su trío cuando el precoz baterista tenía 10 años.