Este EP está compuesto desde la misma potencia emocional que las demás obras de Justin Vernon.
Música
Cameron ventila todo el divertimento en 35 minutos, así que Oxy music invita a la escucha reiterada. Un objetivo insólito, sí.
La belleza de este disco radica en que no escucharemos música nueva de The Postal Service, lo que hace apreciar más el legado que dejaron.
De los componentes de One Direction que se han lanzado en solitario, Tomlinson destaca por su apego al la tradición británica en la música.
La formación fue la mejor de su historia con Diana Ross, Mary Wilson y Florence Ballard divirtiéndose y bailando en la icónica portada.
Una galería de horrores de la guerra. PJ Harvey, dama de la guadaña, es protagonista del más desesperado lamento hasta la fecha.
Una vez que su música escapó de su dormitorio, sus canciones capturaron los corazones de la ciudad y, con el tiempo, del mundo.
La banda siempre ha sido sucia, pero en este disco hay un sentimiento espiritual, progresivo en algunas de las canciones.
Juntos, compusieron una de los mas grandes éxitos de Rhythm and Blues de la historia, basado en una palabra y en lo que ella representaba.
Un recordatorio de que incluso si la claustrofobia es un sentimiento desagradable, siempre es poderoso.
Soundgarden no tenía forma de conocer el grunge pero sabían que estaba a punto de cambiar radicalmente a su alrededor.
Aunque Our Garden está fuertemente impregnado de música americana, conserva los sellos sonoros de su geografía original.
En este lanzamiento, limpiaron un poco su sonido y lijaron algunas de sus asperezas sin volverse tibios o mansos.
Tad se convirtió inicialmente en los antepasados de la floreciente escena musical de Seattle. Pioneros del Grunge.
El segundo álbum de la banda de Baltimore extendió la mano y tocó a muchos más corazones y mentes.
La banda de guitarras de Malí tiene todas las características de los héroes del crossover del rock africano.
Mirarse al espejo no tiene por qué ser necesariamente un acto de vanidad. Ni de autoflagelación.
No debe ser fácil lograr un lanzamiento tan denso de stoner rock apta para todo público, pero Josh Homme lo hizo de nuevo.
Hasta la fecha considerado como uno de los debuts más prometedores, debido a la introspectiva que Interpol utilizó en sus temas.
Christfucker no fue anunciado como un álbum conceptual sobre corromper al mesías a través del sadomasoquismo, pero podría serlo.
Una crítica mordaz a las culturas dominantes, pero un deleite con texturas delicadas que apelan al amor, la comunidad y la paz.
Una obra que azota en el rostro y los oídos en el más puro de los sentidos. Tanto así, que su filo sónico y político sigue resonando.